Crianza Moderna: tipos de crianzas alternativas

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Cada vez hay más padres que apuestan por una alternativa a la crianza tradicional, más cercana al apego, a los ritmos naturales de sus hijos, más consciente y respetuosa. Para variar, es normal que este tipo de crianza alternativa, como es el caso de la crianza moderna que veremos hoy, no sea aceptada por la mayoría, empezando por familiares que critican y siguiendo por los amigos que juzgan.

A veces el cambio o traspaso de lo tradicional a lo moderno suele darse a medida que los hijos crecen, otras veces sucede desde el embarazo y para muchos, pasa a partir del nacimiento.

Y es que hasta que no tenemos en nuestros brazos a nuestros pequeños, a veces no sabemos realmente cómo reaccionaremos ante ellos.

Bien, hoy en día hay varios nombres que salen a la luz cuando hablamos de tipos de crianza moderna.

 

Surgirá entonces, basándonos en el respeto a nuestros hijos, la crianza respetuosa que no difiere mucho de la teoría del apego establecida por el psicoanalista John Bowlby (aunque esta teoría sólo habla de la etapa primal de un niño, es decir, los primeros 3 años de vida) y va de la mano con la crianza fisiológica (tratada por Melina Bronfman, con influencias de Emmi Pikler) y la crianza natural.

Si bien estos tipos de crianza son similares y comparten muchas características y principios, en realidad, no son lo mismo. Debajo explicaremos brevemente cada uno.

 

Crianza Moderna: tipos de crianza y características

 

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Crianza Respetuosa: Es un estilo o forma de vida donde se considera al niño como una persona que posee los mismos derechos que un adulto. En este tipo de crianza se busca respetar a los niños en todos los aspectos: No se le coloca aretes hasta que así lo decida (respeto por su cuerpo), no se lo bautiza (respeto a sus creencias), se centra en sus necesidades y no los deseos del adulto (respeto a sus tiempos y etapas), etc.

Crianza Natural: Busca entender los mecanismos adaptativos del ser humano que nos permitieron sobrevivir durante millones de años para que comprendamos mejor a nuestros hijos y sepamos porqué actúan como lo hacen y cómo ayudarles en su adaptación en lugar de entorpecerla.

Crianza con Apego: Busca vincular afectivamente al niño y sus padres durante los tres primeros años de vida por medio del respeto y del amor generando confianza, para que se sientan seguros, amados y comprendidos. Aquí se defiende con énfasis que los niños no toman el tiempo del adulto ni son caprichosos, no manipulan, sino que nos necesitan.

Crianza Fisiológica: Respeta las habilidades adaptativas y tiempos/etapas de cada niño a lo largo de sus primeros años de vida. Busca que a los niños no se les impongan reglas o parámetros “ridículos” y no fisiológicos, por ejemplo: horarios para ir al baño o tiempos para “sacarles el pañal”, busca el respeto por el libre movimiento y no imponer ayuda de artículos innecesarios para el que los niños aprendan a sentarse, girarse, pararse, caminar, etc.

 

Siempre decimos que una familia no es mejor que otra por las decisiones que toma en el cuidado de sus hijos, sino que cada una sabe qué es lo que mejor les resulta. Así que sea como fuere que quieran criar a sus hijos, si están acá leyendo esto, es porque alguna vez les picó el bichito de la duda.

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